Benjumeda es autor de dos de los edificios más emblemáticos de la ciudad, el Mercado de Abastos y la Iglesia de San José, de finales del siglo XVIII y parte fundamental del trazado urbano de la ciudad.
Torcuato José Benjumeda y Laguada nació en El Puerto de Santa María el 4 de enero de 1757 de madre de origen genovés y padre de origen malagueño, y discípulo de Torcuato Cayón, que era además su padrino.
La ruta parte de la casa que el arquitecto diseñó y edificó para vivir en ella, junto al Mercado de Abastos de Puerto Real, que también es obra suya. La huella de Benjumeda puede verse en diferentes edificios de la ciudad, incluidas dos de sus iglesias, o el Muelle Fortificado.
1. MERCADO DE ABASTOS | OLD MARKET HALL
Es un edificio Neoclásico de finales del s. XVIII, obra de Torcuato Benjumeda, y el más antiguo de Andalucía en uso como plaza de abastos de titularidad pública. El edificio conserva su dos fachadas, construidas en piedra con llagueado y rematadas por una cornisa, con siete arcos por la Calle Nueva y cinco por la Calle Soledad. Consta de una nave central y dos naves laterales abovedadas. El Mercado de Abastos es el corazón comercial del centro histórico de Puerto Real y en él se pueden adquirir todo tipo de pescados, mariscos, verduras, carnes y productos de temporada.
2. IGLESIA DE SAN JOSÉ | ST. JOSEPH CHURCH
Probablemente el edificio en pie más antiguo de la ciudad, fue consagrada en 1592, aunque no se tiene constancia fehaciente de la fecha de inicio de las obras ni del pasado del edificio. Se trata, en origen, de un templo renacentista con diversas modificaciones a lo largo de los siglos XVIII y XIX que le dan al edificio un eclecticismo armónico y una visión rica y complementaria del sentir de cada época. Los Reyes Católicos le dieron el título de Iglesia Prioral, junto a las Catedrales de Granada y Las Palmas.
3. IGLESIA PRIORAL DE SAN SEBASTIÁN
Se trata de una de las calles que probablemente mejor conservan el aire señorial del casco urbano de Puerto Real en el siglo XVIII. Destacan en ella los magníficos edificios que se encuentran entre las calles Amargura y de La Plaza. Es precisamente en este lugar donde se conserva la hornacina que contiene la cruz verde que da nombre a la calle y que vincula este espacio urbano con la Inquisición.
4. MUELLE FORTIFICADO
A partir de un muelle preexistente del siglo XVI, el arquitecto Torcuato Benjumeda fue el encargado de su fortificación en el siglo XVIII para cubrir las necesidades del puerto de la ciudad como parte del sistema de aprovisionamiento de materiales de construcción y otras mercancías en el marco del traslado en 1717 de la Casa de Contratación a Cádiz. Además, podía servir como espacio de primera defensa frente a posibles ataques marítimos.